La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, se disculpó este jueves con las víctimas que puedan haberse sentido «inquietas» por los fallos detectados en las pulseras de control telemático a agresores machistas.
“Su sufrimiento es mi sufrimiento”, afirmó durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados, donde explicó que la Fiscalía había alertado de que, durante meses, los jueces no pudieron acceder a la información debido a un fallo en la migración de datos tras el cambio de proveedor de Telefónica a Vodafone. Esto provocó, según el informe, «una gran cantidad de sobreseimientos provisionales o fallos absolutorios» en casos de quebrantamiento de órdenes de alejamiento.
Martínez Perza aclaró que el problema quedó resuelto a finales de 2024 y aseguró que en 2025 no se ha registrado «ninguna incidencia» relacionada con la transición de empresas, un proceso que describió como «duro y difícil» porque «había que hacer todo de nuevo». Sobre el retraso en hacer públicas estas incidencias, defendió que su departamento prefirió mantener la «discreción» para proteger a las víctimas y no generarles una sensación de inseguridad.
La comparecencia se produjo a petición propia de la delegada y por solicitud del Partido Popular, que insiste en pedir la dimisión de la ministra de Igualdad, Ana Redondo, «por negligencia, por ineptitud, por ocultación y por mentir». Esto ocurrió un día después de que el Pleno del Congreso aprobara reprobar a Redondo por este mismo asunto, con el apoyo de PP y Vox y la abstención de ERC, Junts, BNG y Coalición Canaria. Martínez Perza insistió en que las incidencias fueron residuales, señalando que de los 30 millones de geolocalizaciones diarias solo un 0,0004% presentaron problemas.
La delegada también reclamó a la Fiscalía que aporte los datos que respalden las absoluciones mencionadas en su Memoria de 2025. A su juicio, el Ministerio Público ha vertido «una valoración opinativa que no se corresponde con los datos». Además, aseguró que hasta la fecha solo han recibido ocho quejas provenientes del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), la Audiencia Nacional y jueces y magistrados, y aclaró: “Es verdad que en alguna se explica más de un caso, pero no tengo todo lo que se está diciendo por ahí”.
Martínez Perza defendió la mejora tecnológica de las nuevas pulseras y la plataforma implementada tras el cambio de proveedor. Señaló que, como cualquier dispositivo electrónico, pueden sufrir fallos, pero aseguró que “las víctimas siempre han estado protegidas” y que, hasta la fecha, ninguna mujer ha sido asesinada mientras portaba uno de estos dispositivos.
Finalmente, informó de que, a 31 de agosto, hay 4.730 víctimas registradas en el sistema Cometa. La delegada enfatizó que el sistema está plenamente operativo y que, aunque es susceptible de errores puntuales, constituye una herramienta esencial para la protección de las mujeres frente a agresores machistas.