La brutal ofensiva que lleva a cabo el ejército isaraelí sobre la Franja de Gaza deja tras de sí un reguero de destrucción y muerte y el éxodo de cientos de miles de personas que no saben dónde ir porqueno tienen dónde ir. Sólo en las primeras horas de la ofensiva han muerto más de cien personas, la mayoría niños y la respuesta internacional sigue siendo pusilanime.
Las imágenes de colas inmensas de palestinos que ocupan las vías de salida de la Franja estremecen. Con sus enseres más necesarios a lo lomos de animales o en vehículos rudimentarios, el éxodo es una bofetada de vergüenza para el mundo que permite que Israel acometa este genocidio, como ha reconodio oficialmente la ONU.
El presidente isaraelí Netanyahu admite que el objetyivo es arrasar Gaza y para ello el despliegue de fuerzas es descomunal con el apoyo norteamericano, que sigue las operaciones sin reproches.
El ministro israelí de Defensa, Israel Katz, ha reiterado este martes que «Gaza será destruida». Lo ha hecho apenas unas horas después del inicio de la nueva ofensiva militar a gran escala sobre el enclave palestino, con la que el Gobierno espera recuperar a los rehenes, pese a las advertencias sobre el riesgo que corren.
El ministro aseguró que los palestinos «pagarán el precio» y que «Gaza será destruida». Responsabilizó a los altos mandos de Hamás, a quienes acusó de haber «arruinado y acabado» con el enclave, según recoge Europa Press.
Katz justificó la operación por la negativa del grupo a entregar las armas y liberar a los rehenes de forma voluntaria. Aseguró que el despliegue «está derrotando de manera directa» a Hamás y que, al mismo tiempo, «crea un mayor incentivo para la liberación de quienes siguen bajo su poder».
El Ejército de Israel ha anunciado este miércoles la apertura de una «ruta temporal» que estará disponible durante 48 horas para la evacuación de los residentes de la ciudad de Gaza y de sus barrios ante la nueva fase de la ofensiva militar a gran escala sobre el enclave palestino para tomar su principal urbe.
«Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anuncian que, para facilitar el movimiento hacia el sur, se está abriendo una ruta de transferencia temporal a través de la calle Saladino», ha publicado en su cuenta de X el portavoz en árabe de las fuerzas israelíes, Avichay Adraee.
El mensaje, acompañado de un mapa, orienta a la población hacia el sur del enclave e insta a los residentes a «circular únicamente por las calles marcadas en amarillo en el mapa como ruta sur». «Obedezca las instrucciones de las fuerzas de seguridad y las señales de tráfico», ha añadido.
Los viajes por esta ruta, reza la publicación de Adraee, estarán disponibles desde este miércoles a las 12:00, hora local (11:00, hora española), hasta la misma hora del viernes.
Este anuncio se produce después de que el Ministerio de Defensa israelí haya anunciado este martes el inicio de una nueva fase de la ofensiva contra el enclave palestino para «tomar el control de la ciudad de Gaza porque hoy es el principal símbolo de gobierno de Hamás», el Movimiento de Resistencia Islámica, que controla las autoridades gazatíes.
Asimismo, el Ejército israelí lanzó este martes una ofensiva a gran escala para capturar la ciudad de Gaza, situada en el norte de la Franja, tras semanas de bombardeos y órdenes de evacuación. Según las autoridades palestinas, los ataques dejan ya cerca de 65.000 muertos y más de 165.300 heridos.
De otro lado, la ONG Human Rights Watch (HRW) ha denunciado este miércoles que las fuerzas israelíes que ocupan partes del sur de Siria desde diciembre de 2024 han obligado al desplazamiento forzoso de la población local, «lo que constituye un crimen de guerra», entre otros abusos y detenciones que incluyen expropiaciones y demoliciones de viviendas.
HRW ha denunciado de este modo que desde el colapso del régimen de Bashar al Assad, Israel ha avanzado profundamente en la zona desmilitarizada supervisada por la ONU que separa los Altos del Golán -territorio sirio que Israel ocupa desde 1967- de la parte de la provincia de Quneitra que permaneció bajo control sirio, y ha establecido nueve puestos militares que se extienden desde el monte Hermón, pasando por la ciudad de Quneitra, hasta partes del oeste de Daraa. Asimismo, ha denunciado que Israel ha impedido que decenas de miles de sirios desplazados regresen al Golán desde 1967.
La ONG ha señalado que las autoridades israelíes han reiterado su intención de desmilitarizar el sur de Siria, haciendo alusión a hechos como la operación anunciada por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) el pasado domingo por la cual dos batallones penetraron «38 kilómetros en territorio sirio» para confiscar «más de 300 armas diferentes» en un supuesto depósito abandonado del régimen de Bashar al Assad. Tras ello, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, iniciaron operaciones de búsqueda en la ciudad suroccidental de Saysoun, allanando varias viviendas con el pretexto de buscar armas, y establecieron también un puesto de control para registrar a vehículos y peatones.