El Ministerio de Sanidad de Gaza denuncia que los bombardeos continúan afectando a instalaciones médicas y obstaculizan las labores de rescate
La tragedia humanitaria en Gaza sigue escalando. Las autoridades locales han elevado este miércoles a 53.655 los muertos y a 121.950 los heridos desde que comenzó la ofensiva israelí el pasado 7 de octubre. Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, al menos 82 personas murieron y 262 resultaron heridas en las últimas 24 horas debido a los bombardeos israelíes, mientras miles de cuerpos siguen atrapados entre los escombros por la imposibilidad de acceso de los equipos de rescate, según una información publicada en Europa Press.
Desde el Ejército israelí aseguran haber alcanzado más de 115 objetivos en la última jornada, entre ellos lanzaderas, túneles y supuestas células armadas. Además, confirmaron la muerte de un presunto miembro de la unidad de élite de Hamás.
Ataques a hospitales
En paralelo, el Ministerio de Sanidad gazatí denunció ataques deliberados contra generadores de hospitales, como el del Hospital Indonesio, ahora fuera de servicio. La escasez de combustible y repuestos agrava aún más la situación. Desde Gaza, reclaman presión internacional urgente para garantizar la entrada de ayuda humanitaria.
Además del colapso hospitalario, la situación en Gaza es cada vez más crítica desde el punto de vista sanitario y humanitario. Organizaciones internacionales como la ONU y Médicos Sin Fronteras han advertido de la inminente parálisis del sistema sanitario en el enclave, donde más del 70% de las infraestructuras médicas están fuera de servicio o gravemente dañadas. La falta de suministros básicos, como anestésicos, antibióticos y bolsas de sangre, convierte cualquier intervención médica en un riesgo mayor. Asimismo, los cortes prolongados de electricidad y la escasez de agua potable agravan el panorama. Mientras tanto, más de un millón de desplazados internos se hacinan en refugios improvisados, sin condiciones mínimas de higiene ni seguridad.