Un guardia civil destinado en La Mojonera (Almería) ha sido indemnizado con 111.845 euros por las graves lesiones sufridas durante un servicio en noviembre de 2020, cuando logró frustrar un intento de robo con fuerza en dos viviendas. El agresor, que fue condenado por robo, atentado a agente de la autoridad y lesiones, empujó al agente durante su intento de fuga, provocándole una caída que derivó en una larga recuperación de 437 días.
A pesar de que el Juzgado de lo Penal n.º 2 de Almería dictó sentencia en 2023 fijando la indemnización a cargo del condenado, el agente no recibió el dinero de inmediato. El motivo fue que el delincuente se declaró insolvente, lo que obligó a reclamar la compensación a la Administración General del Estado, tal y como permite la legislación vigente para miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
La Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) acompañó al agente durante todo el proceso. Su abogado, Fran Peláez, ha destacado que se trató de un caso complejo que incluso fue archivado inicialmente, y que requirió un seguimiento jurídico minucioso hasta lograr primero una condena y, después, el pago efectivo. “La administración ha abonado ya la cuantía íntegra y, con ello, podemos hablar de satisfacción total para nuestro asociado”, señaló.
El agresor fue condenado a 1 año y 8 meses de prisión por robo con fuerza en grado de tentativa, 6 meses por atentado contra agente de la autoridad, y una multa de 720 euros por las lesiones ocasionadas. Aunque la cuantía de la indemnización se fijó en sentencia firme, la ejecución efectiva solo se pudo materializar una vez activado el procedimiento subsidiario a través del Estado.
Desde APROGC han destacado la importancia de este caso como precedente: “Es un ejemplo de cómo la ley protege, aunque con ciertos obstáculos, a quienes se juegan la vida en defensa del orden público”. La indemnización se convierte así en un símbolo de reparación institucional a quienes, incluso en circunstancias adversas como una pandemia, siguen cumpliendo con su deber.