Hoy: 23 de noviembre de 2024
Los noctámbulos, personas que deambulan por la noche, tienen casi un 50% más de probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 (DT2) que los que se acuestan más temprano, según EP.
Asimismo, tienen el Índice de Masa Corporal (IMC) más alto, cinturas más grandes, más grasa corporal oculta, según ha descubierto una nueva investigación que se presentará en la Reunión Anual de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD) en Madrid, del 9 al 13 de septiembre.
El investigador principal, el doctor Jeroen van der Velde, del Centro Médico de la Universidad de Leiden, en los Países Bajos, afirma: “Estudios anteriores han indicado que un cronotipo tardío (que prefiere acostarse tarde y despertarse más tarde) está asociado con un estilo de vida poco saludable. Los cronotipos tardíos son más propensos a fumar o a tener una dieta poco saludable, por ejemplo, y se ha sugerido que esta es la razón por la que tienen un mayor riesgo de sufrir obesidad y trastornos metabólicos, incluida la diabetes tipo 2.
“Sin embargo, creemos que el estilo de vida no puede explicar por completo la relación entre un cronotipo tardío y trastornos metabólicos. Además, si bien se sabe que un cronotipo tardío está asociado con un IMC alto, no está claro en qué medida el cronotipo afecta la distribución de la grasa corporal”, señala.
Para obtener más información, el Dr. van der Velde y sus colegas estudiaron la asociación entre el horario de sueño, la diabetes tipo 2 y la distribución de la grasa corporal en más de 5.000 personas, como parte del estudio de Epidemiología de la Obesidad de los Países Bajos, una investigación en curso sobre la influencia de la grasa corporal en la enfermedad.
El análisis incluyó a personas (54% mujeres) con una edad media de 56 años y un IMC medio de 30 kg/m 2 . Los participantes rellenaron un cuestionario sobre sus horarios habituales de acostarse y de despertarse y a partir de ahí se calculó el punto medio del sueño (MPS).
Los participantes se dividieron en tres grupos: cronotipo temprano (el 20% de los participantes con la MPS más temprana), cronotipo tardío (el 20% de los participantes con la MPS más tardía) y cronotipo intermedio (el 60% restante de los participantes).
Se midieron el IMC y la circunferencia de la cintura de todos los participantes. Se midió la grasa visceral y la grasa hepática de 1.526 participantes mediante resonancia magnética y espectroscopia de resonancia magnética, respectivamente. Los participantes fueron seguidos durante una mediana de 6,6 años, durante los cuales a 225 se les diagnosticó diabetes tipo 2.