Este domingo, la Plaza de San Lorenzo de València se convirtió en escenario de una concentración histórica. Frente a la fachada principal de Les Corts Valencianes, centenares de personas se reunieron para exigir cárcel para el ‘president’ de la Generalitat en funciones, Carlos Mazón, y la dimisión de todo su Consell. La protesta surgió como respuesta a la gestión de la DANA del 29 de octubre de 2024, que dejó 229 víctimas mortales en la provincia.
Más de 200 entidades sociales apoyaron la convocatoria. En el centro de la concentración, varias pancartas formaban un círculo. La más destacada pedía prisión para Mazón. Otras denunciaban la responsabilidad política: “Nuestros familiares han muerto por vuestra incompetencia”. Los asistentes corearon consignas como “Volem votar”, “No són morts, són assassinats” y “Partido Popular, partido criminal”. También exhibieron dos muñecos gigantes, uno de Mazón y otro de la vicepresidenta Susana Camarero, con las manos pintadas simulando sangre.
El acto incluyó un homenaje solemne. Una comitiva depositó una flor por cada una de las 231 víctimas que las asociaciones contabilizan. Todo al ritmo de ‘tabal i dolçaina’, mientras se mostraban carteles y fotografías recordando a quienes perdieron la vida en la tragedia, según Europa Press.
La concentración coincidió con el primer aniversario de la primera manifestación que recorrió las calles de València, en la que se reunieron más de 130.000 personas según Delegación de Gobierno. Rosa Álvarez, presidenta de la Asociación de Víctimas Mortales de la DANA 29-O, tomó la palabra para resaltar los avances logrados. “Pese a quien pese, hemos conseguido echar fuera a Mazón”, afirmó. Según Álvarez, el siguiente paso es que sea puesto a disposición judicial y renuncie a su acta de diputado.
En sus intervenciones, los representantes de las entidades recordaron que no aceptarán imposiciones desde Madrid sobre quién debe gobernar en Valencia. Mariló Gradolí, presidenta de la Associació de Víctimes de la DANA 29 d’Octubre, y otros portavoces leyeron un manifiesto que clamaba por justicia y transparencia. Las emociones fueron palpables. Aplausos, abrazos y lágrimas se entrelazaron con los gritos de “Ací està el poble valencià”.
La concentración dejó claro un mensaje: un año después de la tragedia, la sociedad valenciana sigue reclamando justicia y responsabilidades políticas. No se trata solo de recordar a las víctimas, sino de exigir que quienes gestionaron la emergencia rindan cuentas. La DANA de 2024 no será olvidada, y quienes la administraron serán vigilados por la memoria colectiva.