Volvió a quedarse sin marcar el Real Madrid ante el Rayo Vallecano en Vallecas, lo que confirmó el bajón ofensivo del equipo y de su principal figura, Kylian Mbappé, que acumula dos partidos consecutivos sin ver puerta por primera vez desde abril. Es, además, la primera vez desde mayo de 2023 que los blancos encadenan dos encuentros seguidos sin anotar.
Es más, la última vez que Mbappé atravesó una racha similar fue el 16 de abril, durante su primer año en el club, según recoge Europa Press. Aquella fecha quedó marcada por la eliminación ante el Arsenal en los cuartos de final de la Champions League, uno de los golpes más duros de la temporada pasada. El francés llegó a sumar cuatro partidos seguidos sin marcar, ante Valencia, Alavés y Arsenal (ida y vuelta); en pleno tramo decisivo del curso.
Sin embargo, se repuso con fuerza. Tras perderse dos encuentros por sanción y descanso, el delantero firmó un final de temporada espectacular que le valió la Bota de Oro. Su regreso goleador llegó en la final de Copa del Rey, donde marcó pese a arrastrar molestias en el tobillo. Aquel tanto fue el primero de una racha de nueve goles en ocho partidos, que se extendió hasta el arranque de esta temporada con 18 goles en los primeros 14 encuentros (13 en Liga y 5 en Champions).
Esa dinámica goleadora se ha frenado esta semana; primero, en Champions ante el Liverpool, y después en Liga frente al Rayo Vallecano, el francés se mostró más apático y desconectado. En ambos partidos, el Real Madrid sumó una derrota y un empate, y su estrella apenas generó peligro.
Entre ambos encuentros, Mbappé solo remató cuatro veces, ninguno de ellos entre los tres palos. Una cifra muy inferior a su promedio habitual, con cuatro remates a portería por partido en el resto de la temporada. En Liga, además, fue uno de los dos únicos duelos, junto al de la jornada 3 frente al Mallorca, en los que no marcó ni obligó al portero rival a intervenir.
Hasta ahora, el francés promediaba 62,4 intervenciones por partido, pero en Anfield bajó a 52 y en Vallecas se desplomó hasta 29 toques de balón. Esa desconexión coincide con los más de 180 minutos que el Real Madrid lleva sin marcar, y con el hecho de que Mbappé ha participado en el 53% de los goles del equipo esta temporada.
En Anfield, el problema fue cuantitativo, ya que el Real Madrid apenas se acercó al área rival, con solo dos remates a puerta y 0,45 goles esperados (xG). La ocasión más clara fue de Bellingham, mientras Mbappé apenas pisó el área con balón tres veces.
En cambio, en Vallecas el problema fue cualitativo. El equipo de Xabi Alonso generó mucho más, con 21 remates (cinco a puerta) y 0,98 xG, pero la falta de precisión y la gran actuación del portero argentino Augusto Batalla evitaron el gol.
El bajón llega justo antes del parón internacional, pero a la vuelta, el Real Madrid visitará a Elche en Liga y a Olympiacos en Champions, en una serie de cinco partidos consecutivos fuera de casa.
Aunque el rendimiento lejos del Bernabéu también preocupa. Desde el 0-5 ante el Kairat Almaty, los blancos solo han marcado un gol en tres salidas, el logrado ante el Getafe (0-1).
Si el equipo no anota en el Martínez Valero, encadenaría tres partidos seguidos sin marcar por primera vez desde octubre de 2018, y tres desplazamientos consecutivos sin goles desde mayo de 2023 (Real Sociedad 2-0, Manchester City 4-0 y Valencia 1-0).
Una racha que, más allá de las cifras, refleja la dependencia ofensiva del Real Madrid en Mbappé, y la necesidad urgente de que el francés recupere la chispa que le convirtió en el referente del ataque blanco.