En la corte de Edmund IV el rey debía autorizar a que una pareja pudiese tener hijos y cuando lo aprobaba una placa en la puerta rezaba 'Fornication Under Consent of the King'…
En la famosa copla de La Parrala, unos decían que sí y otros decían que no, según se tenía ignorancia del personaje y dejados llevar por la diferente turbación de verla, aturdida y entre copas. Entiendo yo que la sociedad está dividida…