La llegada de pellets a las playas de varias comunidades se ha convertido en una bronca política en la que Galicía y Madrid se acusan de lenta respuesta
¿Quién lo supo antes y quién acudió más tarde? Aquí está la clave del debate abierto ehtre el Gobierno gallego y el central a raíz del vertido de miles de kilos de microplásticos que están llegando a playas de varias comunidades cantábricas.
Ni gallegos ni Ministerio asumen su responsabilidad en la tardía respuesta al problema, que se ha transformado en arma arrojadiza en la campaña de la Xunta.
Y tampoco ninguna de estas administraciones aclara si el producto es tóxico. Expertos sostienen que sí lo es y puede tener consecuencias, aunque el primer informe encargado por la Xunta para determinar la posible toxicidad de los pellets llegados a las costas gallegas concluye que se trata de elementos no peligrosos y que, incluso, por su composición, son aptos “para uso alimentario”.
Las organizaciones ecologistas Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF han pedido más coordinación entre administraciones para hacer frente a la “catástrofe” del vertido de pellets de plásticos en las costas españolas y han lamentado que la reacción de la Xunta ante la situación “recuerda amargamente a la que tuvo con el ‘Prestige'”.
Grave problema ambiental
La entidades han advertido, en un comunicado, de que esta colaboración es necesaria para resolver este “grave problema ambiental” y que “no se repita una pesadilla en la gestión de una crisis” de este tipo. De momento, Galicia, Asturias, Cantabria han constatado la presencia de los plásticos y País Vasco prevé su llegada.
Al respecto, han criticado que la Xunta no haya elevado la situación de emergencia “que requiere la situación” hasta este martes. “Los protocolos están para aplicarse cuando se dan las circunstancias”, han recordado, valorar positivamente que ahora “se puedan reforzar los equipos de limpieza con el nuevo nivel de alerta tal y como ha hecho Asturias”.
No obstante, han denunciado que “se debería haber activado urgentemente el plan de contingencia por contaminación marina accidental ante las primeras noticias del accidente del buque y la aparición hace casi un mes en los primeros días de tales volúmenes de microplásticos en las playas gallegas”.
Mayor transparencia
Igualmente, han demandado mayor transparencia y han expresado su “preocupación” por la reacción de la Xunta ante el vertido, ya que, a su juicio, “recuerda amargamente a la que tuvo con la marea negra del ‘Prestige’ en 2002 y 2003 y la falta de coordinación con el Gobierno central”.
Al Gobierno gallego le han pedido también “rigor científico y transparencia”. “Debe contar con el asesoramiento de los prestigiosos grupos de investigación de contaminación marina implantados en Galicia”, han defendido, para pedir que “no se haga un uso partidista de la catástrofe” y “se unan fuerzas para luchar contra el impacto a largo plazo del vertido, depurar responsabilidades y reforzar la normativa en la producción, transporte y consumo de plásticos”.
Buenas prácticas en la retirada
Por otro lado, las organizaciones han abogado por una mejor coordinación y buenas prácticas en la retirada del vertido ya que de no ser así “el impacto en el medio puede agravarse”, y han exigido que se haga un seguimiento ambiental “a largo plazo” de la presencia e impacto de estos gránulos, así como identificar acciones para la restauración de los hábitats.
En este sentido, han señalado que se puede llevar a cabo actuaciones como la monitorización de playas para identificar presencia de plásticos o de fauna orillada, así como realizar necropsias sistemáticas a la fauna orillada, deberían implementarse de forma sistemática para poder contextualizar adecuadamente estos problemas.
Diligencias de la Fiscalía
Por último, han celebrado la apertura de diligencias por parte de la Fiscalía de Medio Ambiente ante los indicios de toxicidad y posible delito ambiental y han aseverado que la empresa armadora propietaria del buque portacontenedores ‘Toconao’, con bandera de Liberia, “no puede quedar impune ante este presunto delito ambiental”. “Como mínimo debe hacerse cargo de los costes de restauración bajo la premisa ‘quien contamina paga'”, han sentenciado.
De este modo, han incidido en que el vertido tiene un “grave impacto ambiental” así como “potencial peligrosidad para la salud humana” por sus “indicios de toxicidad”.
“Debido a la dificultad de recolectar el plástico de los océanos y su permanencia prolongada en el medio ambiente, una vez que entra al mar es casi imposible removerlo. Más aún, el plástico continúa desintegrándose en microplásticos y luego en nanoplásticos, haciendo casi imposible su recuperación y afectando a todos los organismos marinos”, han lamentado.
Tratado y Comisión Europea
En este sentido, han llamado a que el Tratado Global contra la Contaminación por Plásticos, que está en estos momentos en negociación, debería contemplar la reducción global de la producción de plásticos, la eliminación del uso de los aditivos más peligrosos para el medioambiente en su composición, la reducción de plásticos de un solo uso, la búsqueda de materiales alternativos más sostenibles y la mejora de la gestión de los residuos y el fomento del reciclado
Además, ha pedido que este documento incluya un fortalecimiento de las medidas de seguridad en el transporte de contenedores para evitar su pérdida y los impactos asociados.
En este contexto, ha recordado que la Comisión Europea publicó su propuesta para reducir la contaminación por microplásticos, incluido este tipo de pellets, la cual “no es lo suficientemente ambiciosa para minimizar la contaminación por plásticos pero abre una oportunidad de establecer una normativa acorde a la magnitud del problema si el Parlamento y los Estados actúan con responsabilidad”.
Eurodiputados españoles socialistas, de IU, Sumar y del BNG han reclamado a la Comisión Europea que se pronuncie sobre el vertido de pellets que afecta a las costas del norte de España y critican la gestión de la Xunta de Galicia, que tachan de “pasiva” y “negligente”.
Los voluntarios vuelven a las playas
Mientras, voluntarios se han organizado para limpiar algunas playas de las provincias de A Coruña y Pontevedra a las que ha llegado el vertido de los pellets de plástico.
Aunque gran parte de las limpiezas han surgido de forma espontánea por parte de la ciudadanía, la organizada en Nigrán está coordinada por el Ayuntamiento y cuenta con la colaboración de la Asociación de Escolas de Surf Patos y el Club Marítimo de Panxón.
Además, han lanzado una serie de recomendaciones para proceder a la limpieza. Entre ellas, acudir con guantes, no excavar en la arena y limpiar solo la capa superficial, no extraer elementos naturales de la playa, y mantener distancia con las aves para evitar que se estresen, entre otros.
Acción ciudadana
La acción ciudadana no se limita a la limpieza de arenales. La asociación NoiaLimpa, la primera en dar la voz de alarma sobre el vertido a mediados de diciembre, ha lanzado una recogida de firmas online para “parar la contaminación marina de pellets y por una nueva normativa más segura”.
A través de Change.org, NoiaLimpa, Ecoloxistas en Acción, Plademar, Good Karma Projects, Redes de Sal, Festival Mar de Mares y Surfriders España, se dirigen al conselleiro de Mar, Alfonso Villares, y a la ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, para reunirse con ellos e instarlos a “tomar medidas inmediatas y efectivas para proteger el ecosistema marino y que una catástrofe como esta no se repita #nuncamais”.
Explican que, por su aspecto, los pellets son ingeridos por la fauna marina, que las confunde con huevos o krill, y son filtradas también por ostras, mejillones y algas. Además, su tamaño dificulta su limpieza, “por lo que se teme que esto derive en una “marea blanca” de consecuencias trágicas para el medio ambiente y que afecta directamente a las comunidades costeras que viven de la pesca, el marisqueo y el turismo, sin olvidar todos los daños indirectos que genera esta contaminación en un ecosistema que produce la mitad del oxígeno del mundo”.