La hija de Juan Carlos I continúa sin desvelar ningún detalle sobre el acuerdo de divorcio con el exbalonmanista
Después de más de 20 años de matrimonio, la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín habrían puesto fin a su matrimonio hace apenas unas semanas en la más estricta intimidad. Durante este proceso, uno de los aspectos más comentados era la retirada de los escoltas de Urdangarín, un cambio que podría incidir en su vida personal y su relación con Ainoa Armentia.
En medio de estos cambios, Pablo Urdangarín ha sido respaldado fervientemente en su carrera como jugador de balonmano, al recibir muestras de apoyo constantes. En un partido reciente en el Palau D’esports de Granollers, Pablo Urdangarín pudo contar con el aliento de su madre, la infanta Cristina, quien asistió junto a Johanna Zott y una conocida.
Un gesto revelador durante el partido
Durante el partido, la hija de Juan Carlos I no paró de animar al equipo, aunque, sin duda alguna, el momento más sorprendente fue cuando, sin apartar la vista de la pista, jugaba con su alianza de bodas. Hacía intención de sacarse el anillo del dedo pero, finalmente, lo dejaba de nuevo en su sitio, donde ha permanecido todos estos años
Al terminar el partido, Pablo Urdangarín daba un abrazo y un beso rápido a su pareja y después, daba dos besos a su madre. Como ya es tradición, el joven se ponía en el asiento del conductor mientras que la infanta Cristina se colocaba en el asiento del copiloto y Johanna se colocaba en la parte de atrás del vehículo. Al pasar junto a la prensa, no desvelaba cómo se encuentra tras haber firmado el acuerdo de divorcio con Iñaki Urdangarín.