El segundo hijo del icónico torero anuncia su intención de someterse a pruebas de ADN para comprobar si Jacobo es realmente su hermano
Jaime Ostos Jr., hijo del célebre torero Jaime Ostos y Consuelo Alcalá, emerge como protagonista en el escenario de la disputa familiar que sacude a los Ostos. Aunque reside en Estados Unidos, no vacila en lanzarse de lleno en una contienda legal contra su hermano Jacobo y Mari Ángeles Grajal, con el objetivo de reclamar su parte legítima de la herencia paterna.
Decidido a esclarecer la verdad, Ostos Jr. anuncia su intención de someterse a pruebas de ADN para verificar su parentesco con Jacobo. “La señora Grajal tenía un amante y se parece mucho a él”, ha asegurado en declaraciones a Y ahora Sonsoles, donde ha dejado claro que va a por todas y luchará en los juzgados para que tanto él como sus hermanas Gabriela y Gisela reciban la legítima del millonario patrimonio de su padre.
La lucha por la justicia
“Ahora tengo toda la documentación para desmontar lo que ha dicho Jacobo en un juzgado. Ya están mis abogados poniendo las demandas y en unos días le llegarán. No sabemos si se hizo testamento y hasta hace poco no teníamos ni el certificado de defunción de mi padre. Sigue sin estar registrada la defunción en el Registro Civil. Yo me he preocupado de conseguir la documentación y se hará lo que la ley dicta”, ha señalado con firmeza.
Entre los objetos que reclama junto a su hermana Gabriela, se encuentra un capote de paseo con un significado sentimental profundo para Jaime. “Se hizo para mi bautizo después de que mi padre sufriera una cogida grave. Todos los trofeos y otras cosas taurinas que tiene Jacobo en su casa deberían estar en un museo taurino”, ha criticado.
El reclamo por la dignidad familiar
Lejos de detenerse ahí, Jaime Jr ha revelado que sus acciones legales contra Jacobo y Mari Ángeles no se detendrán: “Esta señora, Grajal, cuando quedó embarazada tenía un amante, y su hijo se parece mucho a ese hombre. No voy a mencionar nombres, pero conocemos las fechas, y si saben quién es, se darán cuenta de que se parece mucho a este señor. Aunque está reconocido por mi padre, solicitaré una prueba de ADN para confirmar si es hijo de él“, ha adelantado.
“Si Jacobo realmente tuviera nuestra sangre, no se comportaría de esta manera. Habría actuado de manera correcta. Él tenía muy poco respeto por mi padre, casi ninguno”, ha sentenciado.