El monarca se aloja de nuevo en la casa de su amigo Pedro Campos en Sanxenxo
Dos meses después de su última visita, el rey emérito don Juan Carlos aterrizó en Vigo este lunes, marcando su sexta visita en tres años y la quinta en lo que llevamos de 2023. Como es ya una costumbre, se dirigió directamente a la casa de su íntimo amigo Pedro Campos en Sanxenxo, donde tiene previsto alojarse en los próximos días.
La sorpresa de su regreso, que muchos no esperaban hasta este jueves, radica en su participación a bordo de ‘El Bribón’ en la última prueba de la Copa de España de vela en la categoría 6m, la cual es la última regata del año y cuya clausura presidirá el propio monarca este domingo.
Antes de la competencia, se espera que disfrute de la localidad pontevedresa, tal como hizo a finales de septiembre cuando, con motivo de la visita de la Infanta Margarita, sus sobrinos María y Alfonso Zurita, y su ahijado Carlitos, de 5 años, realizó actividades como un paseo en barco por la Ría de Pontevedra y una cena en el popular restaurante D’Berto en O Grove, entre otros planes.
Aunque en sus primeras horas en Sanxenxo no se ha dejado ver, se especulaba que el martes podría acercarse al Club Náutico para encontrarse con la tripulación del ‘Bribón’ y comenzar los entrenamientos. Sin embargo, ha optado por quedarse en la casa de Pedro Campos, donde recibió las primeras y esperadas visitas.
Por la mañana, el ex alcalde de La Coruña, Paco Vázquez, quien mantiene una estrecha amistad con el emérito, se acercó a la residencia del armador y su mujer, Cristina Franze. Al mediodía, tuvo lugar el reencuentro más esperado con su hermana doña Margarita, su sobrina María Zurita y su cuñado Carlos Zurita, quienes llegaron a Sanxenxo en coches separados y evitaron hacer declaraciones a las cámaras apostadas en la puerta de la casa de Pedro Campos.
El reencuentro familiar se vivió con emotividad, especialmente por parte de la querida hermana del monarca, emocionada por abrazar de nuevo a don Juan Carlos. En otro vehículo, una sonriente María llegó con su padre, quien visita Sanxenxo por primera vez, ya que en el anterior viaje de su mujer y sus hijos a la localidad no les acompañó.
En las próximas horas, se espera que se sume al reencuentro la Infanta Elena, quien, demostrando una vez más su estrecha relación con su padre, ha decidido aparcar todos sus compromisos para arropar al Emérito en esta nueva visita, que se extenderá previsiblemente hasta principios de la próxima semana.