El horizonte de los amigos es un paisaje de afectos; el de los socios, una abultada cuenta corriente. Equivocadamente solemos decir: “Pídele el favor a tu amigo, que los amigos están para eso”… no, los amigos están para ser queridos y, si
Entiendo yo que la base de la teología antropológica, que se hace miniatura espléndida en los místicos del siglo XVI, está fundamentada en la dignidad del hombre
Curiosamente, la misma persona que no puede salir a la calle porque le abuchean es la que no permite que pernocte en Madrid a quien aplauden con intensidad y “vivas” cada vez que aparece
Nuestro Presidente de Gobierno tiene últimamente cara de turbación contenida, como si le asaltara esa vieja melancolía que aparece cuando se tiene conciencia irremediable de haberse equivocado. En el rostro que puso cuando fue a visitar el osario de Cuelgamuros, vestido de