El vallista español de origen cubano Orlando Ortega, subcampeón olímpico en los 110 metros vallas en Río 2016, ha anunciado su retirada del atletismo profesional a los 34 años. En un emotivo mensaje difundido en sus redes sociales, el atleta explicó que las continuas lesiones le han llevado a tomar una decisión inevitable. “El sufrimiento tiene un límite, no siempre se puede poner la salud en juego ni pasarlo mal por no poder hacer lo que tanto me apasiona”, escribió, asegurando que se despide de la alta competición, pero no de su amor por el deporte.
Ortega, que obtuvo la nacionalidad española en 2015, cierra así una trayectoria marcada por el éxito y la superación personal. “Me retiro con la cabeza en alto, orgulloso de mi carrera deportiva y sabiendo que, gracias a Dios, pude lograr lo que muy pocos han podido lograr dentro del atletismo”, expresó el atleta, recordando su medalla de plata olímpica y los momentos inolvidables que le acompañaron a lo largo de su carrera. Pese a las dificultades, subrayó que su espíritu “siempre ha sido y será el de un ganador”.
El deportista también reconoció que su retirada es un acto de responsabilidad hacia sí mismo y su entorno. “Mi amor por este deporte es tan grande que sería capaz de sacrificar mi vida entera, pero no puedo seguir siendo egoísta ni conmigo mismo ni con mi familia”, confesó. Ortega explicó que, aunque su sueño de retirarse en plena forma no pudo cumplirse, considera que este es “el mejor momento para decir adiós”, después de aprender a aceptar que las lesiones forman parte del camino.
Consciente de que empieza una nueva etapa, Ortega aseguró que seguirá vinculado al atletismo desde “otro punto de vista”. “Mentiría si dijera que no es el momento más difícil y doloroso de mi carrera deportiva, pero todo pasa por algo, todo llega y todo termina”, reflexionó. El atleta destacó el orgullo de haber entregado todo su corazón en cada carrera y de haber representado a España y a su natal Artemisa con pasión y entrega.
Su palmarés respalda su legado: medalla de plata en Río 2016, bronce en el Mundial de 2019 y en el Europeo de 2018, además de dos títulos en la Diamond League. En los Juegos de Tokio 2020 no pudo participar por lesión, pero su nombre ya figura entre los más destacados del atletismo español contemporáneo. “De lo que estoy seguro es de que he dejado todo mi corazón en cada carrera, pero ahora es tiempo de que mi espíritu conquiste nuevos horizontes”, añadió con emoción.
Antes de despedirse, Ortega dedicó palabras de agradecimiento a su familia, entrenadores y equipo de apoyo, especialmente a su esposa e hija. “Gracias a ti, he logrado la medalla más grandiosa de este mundo, el trofeo más valioso del universo: nuestra hermosa hija”, escribió. Con ese mensaje, el vallista cierra una carrera ejemplar y abre un nuevo capítulo en su vida, reafirmando que, aunque se retira de las pistas, la “leyenda continúa”.