Luis Tosar se sorprende de que se intente difuminar la importancia de la memoria democrática y la dureza de lo que fue la dictadura

A pesar de los 50 años transcurridos desde la muerte de Francisco Franco, existen nostálgicos

Luis Tosar es uno de esos actores brillantes capaces de convertir cualquier papel en algo que parece escrito para él. Su talento destaca en todas las ficciones en las que participa. Desde Los lunes al sol, Te doy mis ojos o Celda 211, trabajos por los que obtuvo premios Goya. También en producciones más recientes como la miniserie La ley del mar, Matices o la película La infiltrada.

Además de su carrera sólida, el actor siempre ha mostrado principios firmes que no ha dudado en expresar en público. Ahora vuelve a hacerlo en plena promoción de su nuevo estreno, Golpes, la película de Rafael Cobos que narra el conflicto entre dos hermanos, uno delincuente (Jesús Carroza, El niño) y otro policía; enfrentados por su presente y por un pasado marcado por la Transición.

Según recoge Diez Minutos, la película aborda heridas familiares abiertas desde la dictadura de Franco, por entonces todavía reciente. A raíz de ello, Tosar conectó en directo con Jesús Cintora en el programa que presenta en TVE. En la charla abordaron el tema desde una perspectiva actual.

Asimismo, Luis Tosar, uno de los intérpretes más prolíficos del cine español, acumula casi un centenar de películas en cerca de tres décadas de trayectoria. Desde el 5 de diciembre se puede ver en cines Golpes, una historia que combina una trama policial con un drama familiar profundo. En su conexión con Malas lenguas, explicó que en la película seguimos a dos hermanos que deben unirse por un objetivo común: «desenterrar a su papá, que fue asesinado durante la dictadura».

Este argumento llevó a Jesús Cintora a retomar el debate sobre memoria histórica. Recordó que, a pesar de los 50 años transcurridos desde la muerte de Francisco Franco, existen nostálgicos que, en palabras del presentador, «están intentando difuminar la importancia de la memoria democrática y la dureza de lo que fue la dictadura». Tosar respondió con claridad: «No solo no la condenan, sino que además la ensalzan».

También el actor llamó la atención sobre una nueva corriente juvenil que simpatiza con ideas franquistas. Lo expresó con contundencia:

«Ahora es terrible ver como chavalillos de 14 o 15 años ensalzan la figura de Franco, como si este señor no hubiera sido el mismo que cuando un 18 de julio levantó a medio país en armas, se declaró rebelde y provocó una guerra civil durante tres años que nos ha dejado heridas abiertas y sangrando hasta el día de hoy»

Volviendo al foco de la película, Tosar lamentó que aún existan familias que desconocen el paradero de sus seres queridos asesinados durante la dictadura. Señaló la gravedad de impedirles recuperar esos restos:

«Mucha gente, básicamente por odio y por ganas de molestar y de hacer daño, no deja que sus familiares puedan desenterrar a sus familiares de unas tumbas indignas y que se podría ahorrar mucho dolor con todo esto»

La reflexión más amplia llegó después. Según el protagonista de Los favoritos de Midas, la situación actual va más allá del negacionismo aislado. Por ello señaló, subrayando la responsabilidad política en el discurso sobre democracia frente a dictadura:

«Tenemos una serie de partidos, que van mucho más allá incluso de la extrema derecha, que están reivindicando una figura que ha sido funesta para nuestra historia y que provocó 40 años de dolor, de oscuridad y de atraso en este país. Parece que hay bastante impunidad al respecto, la gente sale a la calle, se manifiestan, exaltan una figura como la de Franco y le dan una especie de importancia constructiva que es todo lo contrario de lo que fue este señor»