La Copa del Rey ya está en Sevilla. El trofeo más deseado del fútbol español ha viajado este miércoles a bordo de un tren AVE especialmente vinilado para la ocasión, custodiado por dos leyendas de ambos bandos: Julio Salinas, histórico del Barça, y Pepe, referente del Real Madrid. La Real Federación Española de Fútbol ha vuelto a confiar en Renfe como Tren Oficial de la Final, en un trayecto que ha unido Madrid con Sevilla Santa Justa cargado de simbolismo y expectación.
El presidente de la RFEF, Rafael Louzán, y otros miembros de la organización acompañaron a las dos figuras del fútbol español, que durante el recorrido intercambiaron bromas, recuerdos y predicciones. “Ojalá la Copa se quede en Barcelona, sería una recompensa enorme para estos chavales que han resucitado al Barça”, dijo Salinas, confiado en las opciones de los de Xavi. Pepe, con su habitual templanza, respondió: “El Madrid sabe jugar finales. Esta Copa tiene destino blanco”.
A su llegada a Sevilla, ambos exjugadores posaron junto al trofeo y se dirigieron a los medios. “He dicho a Renfe que si la pueden llevar a Barcelona ya, mejor”, bromeó Salinas. Sin embargo, el recuerdo de las últimas finales con Clásico no juega a favor del Barça: en 2011 y 2014, el Madrid se impuso en ambas. Pepe, campeón en esas ediciones, recordó que “el equipo llega motivado, confía en Ancelotti y esta Copa puede ser un punto de inflexión”.
Este viaje no ha sido solo una puesta en escena. La RFEF ha querido vincularlo a su compromiso con la sostenibilidad. Renfe ha desplegado un dispositivo especial con 16 trenes adicionales (ocho desde Madrid y ocho desde Barcelona), que permitirán el desplazamiento de cerca de 11.000 aficionados este sábado hasta la capital andaluza. Además, se han reforzado los servicios de atención en estaciones y la coordinación con los cuerpos de seguridad para garantizar un viaje seguro y ágil.
El Estadio de La Cartuja acogerá este sábado 27 de abril una final histórica entre dos gigantes del fútbol español. Más allá de la rivalidad, el viaje del trofeo ha dejado una imagen de deportividad y respeto entre dos referentes de los clubes finalistas. “Que gane el mejor”, coincidieron ambos. Lo único claro es que la Copa ya espera al campeón en tierras sevillanas. Y esta vez, llegó en tren.