El juez Juan Carlos Peinado, conocido por instruir la investigación sobre Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, ha presentado una demanda de conciliación contra los ministros Fernando Grande-Marlaska e Íñigo Puente. El magistrado sostiene que ambos realizaron acusaciones que implicarían prevaricación por su parte y exige una rectificación como paso previo a interponer una querella por injurias y calumnias.
Según confirmaron fuentes jurídicas, Peinado busca que se celebre un acto de conciliación con los ministros, aunque éstos no están obligados a asistir personalmente, ya que basta con que lo hagan sus abogados o procuradores. La demanda relativa a Óscar Puente ha recaído en el Juzgado de Primera Instancia Número 104 de Madrid, mientras que la que afecta a Grande-Marlaska aún está pendiente de reparto en el Decanato de los Juzgados de Madrid.
Las críticas de Grande-Marlaska se remontan al pasado 4 de julio, cuando acusó a Peinado de llevar a cabo una “investigación prospectiva ajena a los principios de un procedimiento penal”, lo que, según él, provocaba indefensión a Begoña Gómez. En declaraciones a La Sexta y a RNE, afirmó que en sus 30 años de experiencia como juez nunca había visto un caso semejante y reprochó que no se investigaran “hechos concretos y perfectamente definidos”.
Por su parte, Óscar Puente declaró en una entrevista a eldiario.es el 30 de julio que la instrucción de Peinado era “un viaje a ninguna parte, burda, miserable y una nulidad de libro”. Además, sostuvo que el magistrado perseguía un objetivo político: “Entrar en la Moncloa y grabar al presidente del Gobierno declarando en una causa penal, aunque sea en condición de testigo”. Estas declaraciones habrían motivado la acción legal del juez.
Más allá de los ministros, fuentes cercanas al caso aseguran que Peinado también ha iniciado demandas de conciliación contra el analista Antón Losada, la Cadena SER y un particular, todos ellos por declaraciones que considera ofensivas contra su labor como instructor. Estas iniciativas refuerzan la estrategia del magistrado de defender su actuación judicial frente a las críticas políticas y mediáticas que ha recibido en los últimos meses.