La Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil ha abierto una investigación tras el hallazgo de restos óseos en la Comarca de Regantes, dentro del término municipal de Isla Mayor (Sevilla). El descubrimiento ha activado los protocolos habituales en este tipo de casos, con la colaboración de especialistas forenses.
Las autoridades han informado que, por el momento, no es posible precisar si los restos óseos son de origen humano o animal, ni las circunstancias en las que fueron encontrados. Se están llevando a cabo análisis forenses exhaustivos que permitirán obtener resultados preliminares en los próximos días.
Desde la Guardia Civil han recalcado que no se ofrecerán datos oficiales hasta disponer de conclusiones contrastadas, en línea con los protocolos de actuación establecidos para este tipo de hallazgos.
El hallazgo de restos óseos suele activar procedimientos específicos que implican, además de a la Policía Judicial, a unidades forenses especializadas en antropología y genética. Los análisis preliminares incluirán la datación de los restos, la identificación de su naturaleza —humana o animal— y la evaluación de posibles signos de violencia o manipulación.
Fuentes cercanas a la investigación explican que en este tipo de casos se toman muestras para estudios de ADN, así como pruebas complementarias que puedan ayudar a determinar el tiempo de antigüedad de los restos. Hasta que se disponga de los resultados, cualquier hipótesis permanece abierta, desde un hallazgo arqueológico hasta un posible caso de interés penal.
La Guardia Civil mantiene acordonada la zona y continúa con la recogida de indicios en el lugar.