La octava corrida de la Feria del Aniversario en México concluye sin trofeos

A lo largo de la tarde, la escasa casta de los astados se impuso a los matadores, quienes no encontraron opciones claras para el lucimiento

La octava corrida de la Feria del Aniversario en la Plaza México concluyó sin trofeos para los diestros participantes. Los mexicanos Angelino Arriaga y Juan Pedro Llaguno, así como el venezolano Jesús Enrique Colombo, quien confirmaba alternativa, no lograron cortar orejas en una tarde marcada por la irregularidad de los toros de Rancho Seco. Sin embargo, Angelino Arriaga recibió el premio «Banderilla de Oro», otorgado tras una votación de los aficionados.

En cuanto a la calidad del ganado, los toros de Rancho Seco ofrecieron un juego desigual y una presentación dispar. Destacó el inesperado sobrero de Pastejé, que pese a su mansedumbre inicial, fue mejorando durante la lidia. La entrada fue discreta, con aproximadamente un cuarto del aforo ocupado, según Diario de Yucatán.

A lo largo de la tarde, la escasa casta de los astados se impuso a los matadores, quienes no encontraron opciones claras para el lucimiento. Aun así, se reconoció con aplausos la breve puya al primer toro, que se mantuvo fijo en el castigo, así como la prolongada actuación de Jesús Enrique Colombo durante su confirmación.

Por su parte, Colombo se mostró voluntarioso con el quinto toro, logrando ligar una faena con la mano derecha bajo una intensa tormenta. Pese a su entrega, no obtuvo trofeos que recompensaran su esfuerzo.

Sensaciones encontradas

En el caso de Angelino Arriaga, el primer toro de su lote sufrió una lesión al saltar al callejón, lo que obligó a la salida de un sobrero de Pastejé. Este ejemplar, aunque manso en el caballo, se comportó mejor en la muleta. Arriaga, conocido por su destreza con los rehiletes, ejecutó las banderillas con precisión, aunque más tarde, con su segundo toro, no logró mantener la misma calidad en los pares al violín y al salir del estribo.

Para Juan Pedro Llaguno, la fortuna tampoco estuvo de su lado. Sus toros carecieron de las condiciones necesarias para permitir una labor destacada, dejándole sin posibilidad de brillar en su actuación.

La penúltima corrida de la feria dejó sensaciones encontradas. Aunque no se concedieron trofeos en el ruedo, el reconocimiento de los aficionados a Angelino Arriaga con el premio «Banderilla de Oro» marcó un momento destacado en una tarde de esfuerzos no recompensados y toros de comportamiento desigual.