JOSÉ ELADIO CAMACHO
Que los cambios sean necesarios no los hace imprescindibles. Que fuera de corta edad no significaba que no pudiera decidir sobre lo que le afectaba, y aquella decisión había sido tomada por voluntades ajenas. El camino seguido no era de su agrado, y aún menos el lugar de destino. Lo dejado atrás le era más valioso. La mano que lo aferra no le asiste y le conduce a un lugar no deseado. No le simpatiza quién de esa manera le lleva. “Porqué me pasa esto a mi” – exclama- con voz infantil todavía no formada. Otros, sobre la acera patibularia (1), se le asemejan y le miran solidarios como reos en cadenas.
Sobre la escalinata de acceso, entrado en su foro y rendido a la evidencia, piensa que como el héroe de los cuentos al final encontrará cosas maravillosas.
(1) Patibularia. Adjetivo. Que por su repugnante aspecto o aviesa condición produce horror y espanto.
Sonreía, aunque su sonrisa era una sonrisa triste, porque más triste que su sonrisa triste para él en ese momento era la tristeza de no saber como hacer sonreír a quienes le miraban. Porque lo peor de este mundo a ciertas edades es cuando alguien te hace sentir especial y de repente te aparta de su lado. 🐶💜