La muerte de Liam Payne despierta dudas: varios indicios apuntan a que no habría sido un suicidio

El apagón de las cámaras de seguridad del hotel una hora antes de la caída del músico añade más controversia al caso

La Fiscalía de Buenos Aires, encargada de investigar la muerte del exintegrante de One Direction, Liam Payne, quien falleció tras caer desde el tercer piso de un hotel, ha informado al padre del músico, Geoff Payne, sobre los avances del caso. El fiscal Andrés Madrea ha explicado que los estudios toxicológicos e histopatológicos complementarios a la autopsia aún no han concluido, y estos son clave para determinar las circunstancias del fallecimiento.

Según el medio TMZ, se encontraron varias sustancias en el cuerpo de Payne, incluidas éxtasis, crack, ketamina y «cocaína rosa». Aunque las pruebas también habrían revelado metanfetaminas, el fiscal no ha confirmado esta información, y ha preferido mantener la privacidad y el respeto hacia la familia para no entorpecer la investigación.

Además de los análisis toxicológicos, las autoridades están examinando pruebas como teléfonos móviles, ordenadores y vídeos de cámaras de seguridad, mientras continúan tomando declaraciones de testigos, incluidos trabajadores del hotel y conocidos de Payne, para reconstruir las últimas horas del músico y esclarecer lo sucedido en el momento de la caída.

Un posible homicidio

Aunque el informe preliminar de la autopsia indica que la causa de muerte fue «politraumatismo y hemorragia interna y externa», y se presume que Payne estaba solo al momento de la caída, las indagatorias han dejado abiertas otras posibilidades.

Si bien el suicidio es una de las teorías iniciales, han surgido inconsistencias que podrían apuntar a un posible homicidio, como la falta de señales de que Payne intentara protegerse al caer, lo que sugiere que podría haber estado inconsciente.

Otra línea de investigación señala que Payne habría estado bajo los efectos de sustancias, y la presencia de estupefacientes en su habitación respalda esta hipótesis. Testigos afirman que el músico mostraba un comportamiento errático y agresivo antes de la caída, aunque en sus últimas fotografías se le veía tranquilo. Esto ha generado especulaciones sobre lo que realmente ocurrió en sus últimas horas.

El hecho de que las cámaras de seguridad del hotel dejaran de funcionar una hora antes de la caída ha añadido más controversia al caso, ya que algunos seguidores del cantante creen que pudo haber empleados del hotel involucrados en un encubrimiento. Las autoridades continúan con la investigación para esclarecer las circunstancias exactas que rodearon la muerte de Liam Payne.