Hoy: 23 de noviembre de 2024
La reducción de la jornada laboral de las actuales 40 horas semanales a 37,5 horas afectará a más de 480.000 autónomos que emplean a un millón de empleados, según estimaciones difundidas este miércoles por la organización de autónomos UPTA.
Para esta asociación, la “desfasada” fórmula del 40/40 (40 horas semanales de trabajo desde hace 40 años) “evidencia cada vez más el hecho de que la productividad de los negocios no está relacionada con los tiempos de trabajo”.
En este sentido, denuncia que solo el 40% de los autónomos empleadores tiene equipamiento digital para el desarrollo de su actividad económica.
“Desde UPTA abogamos por una efectiva reducción de la jornada laboral, que consideramos necesaria para que exista un avance real en nuestra sociedad y una transformación del tejido productivo, dejando de lado la fórmula que sigue vigente desde hace 40 años. Sin embargo, la reducción de la jornada laboral no es el único factor del que depende la productividad de los negocios”, argumenta.
Así, sostiene que para que dicha productividad no se vea afectada por la adaptación de los horarios, los trabajadores autónomos con pequeños negocios necesitan mecanismos de apoyo que favorezcan la formación de sus empleados, así como, la digitalización de los mecanismos de producción.
“Desde UPTA no consideramos creíbles todas aquellas posturas que continúan negando la instauración de la reducción de la jornada, achacando su fracaso únicamente por el supuesto aumento de los costes empresariales”, afirma la organización.
Así, UPTA subraya que en los países europeos que ya han implementado una reducción de la jornada laboral se ha demostrado que, junto con un plan específico de mejora en la formación y digitalización de los pequeños negocios, “no solo se ha incrementado la productividad, también se ha mejorado considerablemente la motivación de los empleados y la conciliación entre la vida personal y laboral”.
En este sentido, UPTA denuncia que los datos sobre la digitalización de los negocios aún son “muy pobres”, pues el 60% de los pequeños empresarios siguen siendo reacios a la transformación digital.
Para Eduardo Abad, presidente de UPTA España, flexibilizar la jornada o reducir la misma para que los trabajadores puedan tener tiempo de descanso y ocio “es fundamental para mantener a las plantillas, fidelizar y no vivir en una eterna rotación de personal”.
“La productividad nada tiene que ver con el tiempo de trabajo. El Gobierno debe encontrar el equilibrio con los agentes sociales para poder llevar a cabo una modificación legislativa urgente, que reúna el mayor consenso posible, así como iniciar de manera improrrogable el debate de los tiempos de trabajo en el colectivo autónomo”, ha defendido Abad.