Hoy: 23 de noviembre de 2024
Benjamin Netanyahu ha rechazado la última propuesta de alto el fuego presentada por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) para la Franja de Gaza, aprobando en su lugar un plan militar para una ofensiva en la ciudad de Rafá, en la frontera con Egipto.
La oficina de Netanyahu ha calificado las demandas de Hamás como “absurdas” y ha confirmado el envío de una delegación a Qatar para seguir las negociaciones diplomáticas en busca de un acuerdo. Sin embargo, se ha dado luz verde al plan de ofensiva en Rafá, en medio de las advertencias internacionales contra esta acción.
“Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) están preparadas para la operación y para evacuar a la población“, declaró la oficina de Netanyahu tras una reunión del gabinete de guerra, establecido después de los ataques de Hamás el 7 de octubre, según informó el diario The Times of Israel.
Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales han alertado sobre las consecuencias humanitarias de una posible ofensiva en Rafá, donde residen cerca de 1,5 millones de personas, en su mayoría desplazados internos. Gaza ya enfrenta una grave crisis humanitaria.
Previamente, Hamás había presentado una “visión integral” de un acuerdo de alto el fuego a los mediadores, buscando poner fin a la ofensiva militar en Gaza y permitir el retorno de los desplazados internos, según informó el diario Filastin, vinculado al grupo islamista palestino.
La ofensiva israelí en Gaza se desató tras los ataques de Hamás, que dejaron 1.200 muertos y 240 secuestrados. Desde entonces, las autoridades de Gaza han denunciado la muerte de unas 31.500 personas, sumando a esto unos 420 palestinos fallecidos en Cisjordania y Jerusalén Este debido a acciones de las fuerzas de seguridad israelíes y ataques de colonos.