Hoy: 23 de noviembre de 2024
La primera vez que escuché a Serrat cantar su Mediterráneo, el nuestro, pensé que el agua de enfrente, la que me acosa en azules cada día, cobraba un esplendor nuevo que sostuviese al poema. A Serrat se le oye una vez y, en sus más de quinientas canciones, sólo cambia la sutileza de un cansancio en la garganta, como flor que se resistiera a perder colorido. Porque los cantantes, como los que escribimos, terminamos pareciéndonos a nosotros mismos. Y a eso se le puede llamar “creación de estilo”.
Alabo, celebro y agradezco a Joan Manuel Serrat que haya familiarizado a los más grandes poetas sosteniéndolos en el pedestal de su música, igual que una palmera se resiste ante el cierzo que arrasa. Gracias a él, Antonio Machado y Miguel Hernández, principalmente, forman parte de una hermosura compartida, de un desasosiego creativo. Serrat, de su cosecha, nos ha permitido, además, la libación de sus mejores vinos.
Bien merecido premio Princesa de Asturias a Joan Manuel. Amancio Prada debe seguirle en la lista con su voz profunda, serenada por los poemas de San Juan de la Cruz, afilada en ellos, del mismo modo que la fuente amansa en el mármol la bravura del agua.
Un merecidísimo reconocimiento a uno de los grandes cantautores de este País, coherente incluso en la adversidad. Suscribo el merecimiento también para Amancio Prada, sin olvidar a Paco Ibañez , Luis Pastor, Raimon y otros por su difusión de los poetas y su obra.
Si. Pero Amancio Prada, a mi juicio y sólo a mi juicio, por su calidad musical, su voz, su inigualable sensibilidad, su coherencia poética y su “ humanidad” le hacen único…¿ Hay algo mas bello que su Cántico Espiritual de S. Juan de la Cruz?