Hoy: 23 de noviembre de 2024
Dirigentes de Juntos por el Cambio han expresado su desacuerdo con las declaraciones del ministro de Economía y candidato Sergio Massa, en relación a las negociaciones económicas y el acuerdo firmado con el organismo internacional. En este contexto, se plantea la interrogante sobre la postura adoptada por el peronismo durante el gobierno de Macri en relación a dicho acuerdo.
Dirigentes y economistas referentes del partido Juntos por el Cambio han protagonizado un cruce con el ministro de Economía y candidato presidencial del oficialismo, Sergio Massa, en medio de acusación sobre supuestos pedidos al Fondo Monetario Internacional (FMI) para que no otorgue más al Gobierno. Los representantes de los precandidatos Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta han negado rotundamente haber mantenido conversaciones de ese tipo, mientras que el FMI ha mantenido silencio al respecto, aunque fuentes en Washington han restado importancia a dichas afirmaciones. Además, importantes empresarios han desestimado la versión de Massa y sugieren que podría haber un acuerdo “light” respaldado por Estados Unidos, sin la inyección de nuevos fondos,
En un acto reciente, Massa reveló una supuesta conversación con un funcionario del FMI, quien habría afirmado que economistas de la oposición estaban instanciando a no brindar ningún tipo de apoyo financiero al Gobierno y exigirle al máximo en las negociaciones. El ministro expresó su sorpresa ante la idea de que estos políticos estarían dispuestos a que la población atraviese dificultades durante la campaña electoral.
Las respuestas de los referentes económicos de Juntos por el Cambio no se hicieron esperar en las redes sociales. Hernán Lacunza, exministro de Economía de Mauricio Macri, señaló en Twitter un supuesto “Manual K de política económica” que, según él, incluiría incumplir metas acordadas con el FMI, entretener con relatos ilusorios y culpar a la oposición cuando los resultados decepcionan.
En este contexto, se destaca que los economistas de la oposición consultados han negado las versiones vertidas por Massa, asegurando que aún no han tenido contactos formales con el staff del FMI para discutir la continuidad del programa acordado en 2022. Sin embargo, reconoce que es común que el Fondo mantenga conversaciones con la oposición durante los períodos electorales.
Aunque la polémica sobre las supuestas conversaciones continúa, tanto expertos locales como en Washington considerando que el FMI está dispuesto a llegar a un acuerdo que permita refinanciar los vencimientos de Argentina en 2023, aunque sin proporcionar nuevos fondos ya cambio de medidas como una devaluación fiscal o moneda. Además, se menciona que el gobierno de Estados Unidos respalda esta refinanciación, aunque la postura de los socios europeos y Japón aún está por verso.
Empresarios estadounidenses confirman que el gobierno de Joe Biden respalda esta perspectiva y aseguran que la oposición busca una corrección en el lugar de una explosión de la situación económica. Asimismo, señalarán que tienen conocimiento del apoyo del gobierno estadounidense a Argentina en las negociaciones con el FMI, más allá de los aspectos técnicos que se están discutiendo.
En conclusión, se mantiene un intenso debate entre los referentes de Juntos por el Cambio y el oficialismo, en cual se cuestionan las afirmaciones de Massa y se analiza la posible dirección de las negociaciones con la FMI, con la expectativa de alcanzar un acuerdo que permita refinanciar los compromisos financieros de Argentina en el próximo año.
El peronismo ha mantenido una postura crítica frente al Fondo Monetario Internacional (FMI) y la gestión de Mauricio Macri. En 2018, luego de la firma del programa entre Argentina y el FMI, el Partido Justicialista (PJ) expresó su preocupación a través de una carta firmada por Guillermo Moreno, economista y exsecretario de Comercio.
En la carta, Moreno destacó la propuesta del presidente Macri de adelantar los desembolsos del acuerdo Stand-By correspondientes a los años 2020 y 2021 para el año 2019, en un contexto electoral. También dijo que el gobierno actual buscaba alcanzar el equilibrio fiscal en ingresos y gastos operativos, mientras que el déficit provocado por el pago de intereses de la deuda soberana. Además, Moreno planteó que, ante la falta de acceso a los mercados internacionales de crédito, una administración económica sólida por parte de un nuevo gobierno se vería dificultada.
En 2019, Alberto Fernández y sus referentes económicos criticaron duramente el acuerdo con el FMI, afirmando que no lo reconocerían. Fernández argumentó que el programa económico vigente comprometía al país más allá de sus posibilidades y lo perjudicial para el desarrollo argentino. Tras el triunfo de la fórmula Fernández-Fernández en las elecciones primarias, los activos argentinos se desvalorizaron significativamente y el valor del dólar se disparó.
Estas declaraciones por parte del peronismo llevaron al FMI a suspender el desembolso programado para septiembre de 2019, lo que obligó al gobierno de Macri a implementar controles de capitales y dejar de pagar la deuda en pesos. Los acontecimientos posteriores son parte de la historia conocida.
En resumen, el peronismo ha mantenido una posición crítica hacia el FMI y el acuerdo con Mauricio Macri, expresando preocupación por el impacto económico y social de estas políticas.