Hoy: 23 de noviembre de 2024
La Guardia Civil ha logrado desmantelar una red delictiva ubicada en dos fábricas clandestinas de Madrid y Córdoba que se dedicaba a la fabricación y distribución de tabaco de contrabando, así como al lavado de los fondos obtenidos de manera ilícita. En concreto, se han intervenido 33 toneladas de hoja de tabaco y seis millones de cigarrillos falsificados.
La investigación, que aún está en curso, ha arrojado resultados significativos, con múltiples detenciones llevadas a cabo en diversas localidades estratégicas. Entre estas detenciones se incluyen operativos realizados en Antequera (Málaga), Montilla y Lucena (Córdoba), Humanes de Madrid (Madrid) y Azuqueca de Henares (Guadalajara). Además, se han llevado a cabo registros en las provincias de Córdoba y Madrid, como parte de la operación para desarticular por completo esta red criminal.
Uno de los aspectos más destacados de esta operación ha sido la desactivación de importantes centros de producción ilegal de cigarrillos en Lucena y Humanes de Madrid. Estas instalaciones, de gran tamaño y altamente sofisticadas, realizaban todas las etapas de producción de manera clandestina, desde el procesamiento de la hoja de tabaco hasta el empaquetado final de los cigarrillos listos para su distribución en el mercado negro.
Lo más preocupante de estas instalaciones era la forma en que se trataba a los trabajadores. Dentro de ellas, se encontraban áreas claramente diferenciadas para el trabajo y la residencia de los empleados. Estos últimos se veían obligados a vivir en el lugar de trabajo de forma permanente, sin poder salir durante largos períodos de tiempo, lo que constituye una clara violación de los derechos laborales y humanos.
Un aspecto especialmente alarmante fue el descubrimiento en la fábrica de Humanes de Madrid, donde once trabajadores de origen búlgaro estaban siendo retenidos contra su voluntad. Gracias a la intervención de las autoridades, estos trabajadores pudieron ser liberados y se les brindó el apoyo necesario para su reintegración a la sociedad.
Por otro lado, la fábrica desmantelada en Lucena presentaba características aún más siniestras. Estaba diseñada y construida para evitar cualquier tipo de detección desde el exterior, llegando al extremo de camuflar la entrada principal como parte de otra actividad económica aparentemente legítima. En su interior, se encontró un elaborado sistema de ocultamiento, incluyendo un zulo donde se escondían los trabajadores en caso de inspecciones policiales.
Los resultados de esta operación son impresionantes. Se logró incautar más de 6 millones de cigarrillos falsificados y 33 toneladas de hoja de tabaco, con un valor estimado en casi 7.6 millones de euros. Además, se descubrió que parte de este material estaba destinado a los mercados negros de Portugal y Francia, utilizando por primera vez cartonajes genéricos para evadir la detección de las autoridades aduaneras.
Esta operación fue posible gracias al arduo trabajo realizado por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, en colaboración con el Departamento de Investigación Económica y Anticorrupción, así como con la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Córdoba. Además, se contó con el valioso apoyo de diversas unidades de las Comandancias de Badajoz, Córdoba, Guadalajara y Madrid.
Es importante destacar la cooperación internacional mantenida con agencias como EUROPOL, OLAF y el Department of Operational and Search Activities of the Administration of the State Border Guard Service de Ucrania. Especialmente relevante fue la colaboración con la Agencia Estatal de Seguridad Nacional de Bulgaria, que permitió avanzar significativamente en la desarticulación de esta red criminal transnacional.
Además de las acciones policiales, la operación tuvo un impacto positivo en la comunidad local. Durante un registro realizado en las instalaciones ubicadas en Lucena, se incautó una gran cantidad de alimentos no perecederos y de primera necesidad. Estos fueron entregados a Cáritas Diocesana de Córdoba, brindando ayuda a quienes más lo necesitan en momentos difíciles.
A pesar de los logros obtenidos hasta ahora, la investigación continúa abierta y se espera que se tomen más medidas para desarticular por completo esta red criminal y llevar a los responsables ante la justicia. No se descartan nuevas detenciones y operativos en el futuro cercano, en un esfuerzo por garantizar la seguridad y el bienestar de la sociedad.